Un corazón devoto a Dios

En este punto no hay mejor ejemplo de un corazón devoto a Dios que el de María, un gran ejemplo de esto lo señala la autora al contarnos ¿Que hizo María que motivo a nuestro Señor a alabarla? una respuesta sencilla: María discernió aquello que era necesario, nos damos cuenta de esto en la escena en que Jesús llega a casa de marta, y en cuanto se puso a impartir la palabra María decidió dejar lo que hacia y sentar a los pies del Señor mientras Marta continuaba preparando la cena y al sentirse frustrada de estar haciéndolo sola se acerca y le dice: "¿Señor no te da cuidado que mi hermana me deje servir sola? dile pues que venga y me ayude. ¿Quien considera usted querida amiga que hizo lo correcto? acaso fue marta que estuvo ocupada haciendo cosas para el Señor pero no paso ningún tiempo con el, o María que escogió aquello que era necesario.. Estaremos de acuerdo en que María tomo la decisión correcta, acaso hay algo mas hermoso que echar a un lado las cosas segundarías y dedicarse solo al Señor.

¿Como hacerlo? Como podemos ser como María con corazones rendidos al Señor:

1. Escoja los caminos de Dios en cada oportunidad: Debemos tener a Dios presente en cada decisión, palabra y acto que tengamos. El debe ser nuestra prioridad. Proverbios 3:6 "reconoce a Dios en tus caminos y el enderezara tus veredas". Comprométase diariamente a entregarle cada situación a Dios desde la mas favorecedora y llena de alegría, hasta los momentos en lo que alguien te pueda llegar a herir con una palabra pídele al Señor sabiduria para saber que responder y como actuar en cada momento, te aseguro de los grandes cambios que abran en tu vida entonces.

2. Comprométase con Dios a diario: Cada mañana renueve su entrega al Señor y en una oración puede decirle : "Señor me entrego nuevamente a ti", "Sellame con tu Espíritu Santo"

3. Cultive un corazón ardiente: El señor nos dice en apocalipsis: " Yo conozco tus obras, ojala fueras frió o caliente, pero por cuanto eres tibio ni frió ni caliente te vomitare de mi boca". Esto quiere decir que para Dios el corazón mas detestable es el corazón tibio, ya que sabiendo que eres frió he indiferente al Señor no abría ningún problema? pero que conozcas sus obras y aun así le seas indiferente es lo peor. Por eso debemos mantener un corazón ardiente en el Señor tanto que las personas al tocarte puedan quemarse por Sentir ese corazón amoroso y entregado al Señor en ti.